Nuncio en España: «La Agenda 2030 es una declaración utópica para tranquilizar las conciencias»
En una ponencia dedicada a la Agenda 2030 en la Rioja, el nuncio de la Santa Sede en España, Bernardito Auza, criticó el polémico proyecto de la ONU calificándolo de “utopía irrealizable” que tiene como fin “tranquilizar las conciencias”.
19 de junio de 2024 / Por Carlos Esteban (Publicado en infovaticana.com)Atendiendo a una invitación de La Bitácora XXI, el nuncio del Vaticano en España, Bernardito Auza, hizo una aguda crítica a lo que se ha convertido, en palabras de un político del Partido Popular recientemente jubilado, el “evangelio” de nuestro tiempo, la Agenda 2030, «un programa que pretende solucionar a prácticamente todos los males del mundo: tiene 17 Objetivos, 169 metas o targets que, supuestamente, con su carácter integrado e indivisible, abarcan todas las esferas de la vida humana».
Empezó Auza por los aspectos positivos, subrayando la evidente bondad de los objetivos sucintamente expresados en la Agenda, para, seguidamente, alertar sobre siete “sombras” que presenta el proyecto: el olvido de la fundamental en favor de los intereses de las élites, el utopismo irrealizable de las metas, la retórica encamina a “tranquilizar las conciencias”, la imposición de un “pensamiento único” preconcebido, su marcado sesgo ideológico de corte eugenésico y maltusiano, la colonización ideológica que supone sobre culturas que rechazan muchos de sus presupuestos y, finalmente, los aspectos que se oponen frontalmente a los planteamientos de la Iglesia.
En este último sentido, el nuncio citó tres ejemplos concretos de rechazo y reservas de la Santa Sede sobre la Agenda 2030, como son el significado del término “género” en el texto; el sentido de “empoderamiento” (neologismo para traducir el inglés ‘empowerment’) y, sobre todo, el sentido del supuesto “derecho a la salud reproductiva”. En este último punto, Auza recordó que, “dado que el derecho a la salud es un corolario del derecho a la vida, nunca se puede utilizar como una forma de terminar con la vida de una persona. La Santa Sede rechaza la interpretación que considera el aborto o el acceso al aborto, la subrogación materna, el aborto selectivo por sexo y la esterilización como dimensiones de estos términos”.